Sommelier vs boca común: la evolución de la belleza
Boca SOMMELIER vs boca común: la evolución de la belleza
Aunque la conservación del vino y los licores tiene una larga historia que se remonta a tiempos muy lejanos, la idea de usar para almacenar vino se popularizó en Europa a partir del s. XVIII. Desde la Edad Media, se había venido utilizando este material para preservar desde perfumes hasta licores en recipientes surgidos de la habilidad y la pericia de los antiguos sopladores de vidrio, gracias a la técnica centenaria de fabricación manual de la botella de vidrio, que permaneció casi inalterada hasta principios del s.XIX. Es en ese momento cuando un cristalero de Bristol fabrica un molde para producir botellas de cristal en serie, una aportación que permitió estandarizar su forma, los tiempos de producción y estampar letras en relieve sobre cada botella.
La cultura ancestral del vino en botellas de vidrio
Existen numerosas regiones en Europa en las que la cultura del vino ha arraigado y se ha convertido en un sector productivo muy importante. Francia, Italia, España, Portugal y Alemania son probablemente los países en los que más vino se produce, y donde, en consecuencia, se embotellan más litros de este licor. Tradicionalmente, las botellas de vino que se han venido utilizando a lo largo del tiempo en todos estos países han sido siempre muy parecidas.
La innovación de la boca SOMMELIER
La innovación que ESTAL ha introducido en el mercado de las botellas de vidrio para vino gracias a la ha resignificado este elemento en el diseño de la botella. El concepto SOMMELIER supone ofrecer una línea de corte guiada, inequívoca y siempre perfecta, una silueta única y diferente, con una percepción de mayor peso y categoría, así como facilitadora de antigoteo. Además, SOMMELIER se adapta a botellas estándar, permite seguir manteniendo la misma altura de botella, el mismo peso, el mismo corcho y la misma cápsula con un tiempo de producción igual.
SOMMELIER: belleza y funcionalidad
El vino es origen, sencillez, exigencia y matices, los mismos elementos distintivos de la gama SOMMELIER. ESTAL vuelve a ofrecer su alto conocimiento del mundo del vino traducido en su compromiso con una alta calidad, innovación tecnológica y un diseño excelente y pionero. La belleza de las botellas de vidrio para vino de ESTAL, de líneas finas, ligeras, sencillas y elegantes se sublima en la gama SOMMELIER. De nuevo, la luz, la silueta, la pureza y la armonía en las formas destacan y muestran el universo del vino como un magnífico elemento de distinción.
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